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Protector solar con color: ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Por qué?

A veces es mejor utilizar uno con pigmentos, aprende porqué

Guanacaste, Costa Rica – La protección solar es fundamental para mantener una piel sana, no solo en verano, sino durante todo el año. Los rayos ultravioleta (UV) y otras fuentes de luz dañina pueden causar estragos en nuestra piel, incluso en días nublados o con poca luz solar.

Además del clima y el sol, la luz artificial y las pantallas de dispositivos electrónicos también emiten luz visible e infrarroja que pueden ser perjudiciales para la piel. La luz azul de alta energía (HEV), presente en las pantallas, puede causar eritema, envejecimiento prematuro e incluso hiperpigmentación en pieles oscuras.

¿Protector solar con color o sin color?

Ante la necesidad de protegernos de diferentes tipos de luz, surge la duda: ¿protector solar con color o sin color? La respuesta depende de varios factores:

Tipo de luz a la que estarás expuesto:

  • Luz ultravioleta (UV): Ambos tipos de protectores solares, con color y sin color, deben ofrecer protección contra los rayos UVA y UVB. Busca un protector con un factor de protección solar (FPS) de 30 o más.
  • Luz visible: Los protectores solares con color suelen contener pigmentos como óxido de hierro o dióxido de titanio que actúan como filtros de la luz visible, además de aportar color a la piel.
  • Luz azul de alta energía (HEV): Algunos protectores solares, tanto con color como sin color, están específicamente diseñados para proteger contra la luz HEV. Busca productos que contengan ingredientes como luteína, zeaxantina o vitamina E.

Preferencias personales:

  • Cobertura: Los protectores solares con color pueden ayudar a unificar el tono de la piel y cubrir imperfecciones.
  • Textura: Algunos prefieren la textura ligera y transparente de los protectores sin color, mientras que otros prefieren la sensación más cremosa de los protectores con color.
  • Acabado: Los protectores con color pueden tener un acabado mate, satinado o luminoso. Elige el que mejor se adapte a tu tipo de piel y preferencias.

Recomendaciones:

  • Consulta con un dermatólogo: Un dermatólogo puede ayudarte a elegir el protector solar adecuado para tu tipo de piel y necesidades específicas.
  • Lee la etiqueta cuidadosamente: Asegúrate de que el protector solar que elijas ofrezca protección contra los tipos de luz a los que estarás expuesto.
  • Aplica el protector solar generosamente y con frecuencia: Reaplícalo cada dos horas, o más a menudo si sudas o te mojas.
  • No olvides protegerte los labios: Usa un bálsamo labial con FPS.
  • Protege tus ojos: Usa gafas de sol que bloqueen los rayos UV.

Recuerda: La protección solar es una parte importante de una rutina de cuidado de la piel saludable. Al elegir el protector solar adecuado y usarlo correctamente, puedes ayudar a prevenir el envejecimiento prematuro, las manchas y el cáncer de piel.

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