Así ocurrió el terremoto de Tilarán

En la madrugada del 14 de abril de 1973, en las tierras altas de Guanacaste se registró el terremoto de Tilarán y que con una magnitud de 6,5. grados.
El epicentro de ese sismo se localizó 18 km al noreste de la Laguna de Arenal muy cerca del poblado de Tronadora, 7 kilómetros al norte de la ciudad de Tilarán, lugar donde la intensidad en la escala Mercalli fue estimada entre 7 y 9.
El origen del terremoto de Tilarán de acuerdo a lo expuesto por la Red Sismológica Nacional de la Universidad de Costa Rica (RSN) fue tectónico por fallamiento local y no volcánico y fue originado por la falla conocida como Chiripa.
Producto de este terremoto se produjeron un gran número de deslizamientos en las zonas más cercanas al epicentro.
Después del evento principal se registraron cerca de 5 000 réplicas, concentrándose la actividad a lo largo de una línea con dirección NNE entre Tronadora y San Miguel, a unos 5 km de la ciudad de Tilarán.
Daños por el terremoto de Tilarán
El número de fallecidos fue de 23 personas (13 de ellas cerca del poblado Río Chiquito) También se reportaron varias decenas de heridos.
En la zona de Tronadora, la más cercana al epicentro la torre de la pequeña iglesia de Tronadora colapsó y cayó sobre el techo de la iglesia además de daños en estructuras, efectos visibles en el suelo y rompimiento de tuberías.
En la ciudad, el terremoto de Tilarán provocó que la catedral principal de Guanacaste, sufriera daños importantes como agrietamiento de paredes, ventanales rotos y caída de objetos varios.
También en estas zonas y otras del cantón varios kilómetros de líneas de transmisión y teléfono sufrieron daños por el sismo y tuvieron que ser remplazadas. También hubo ruptura de varias tuberías de agua.
Más detalladamente producto de este terremoto de Tilarán, se presentaron gran cantidad de deslizamientos que provocaron el cierre de varios caminos.
Además los deslizamientos bloquearon el curso de los ríos Tronadora y Chiquito por varios días. Hubo agrietamientos en el suelo producto de movimientos diferenciales en material inconsolidado (algunas de estas grietas llegaron a tener hasta 10 m de largo).
En Tronadora se observó cierto grado de licuefacción junto con salida de sedimentos y agua, además de la formación de pequeñas calderas de agua.